alguna noche, ni frío ni calor..
después de un encuentro raro
mezcla de alegría y tristeza
de risa y cariño
de total incertidumbre
de algunas certezas
me miró y me dijo
"Abrazame, que tengo frío"
me apretó fuerte con sus brazos
y no me soltó hasta que tuve que irme.
Hoy, tiempo después, en la misma parada
recordé su frase, y fue justa para una de las canciones que más me gustan de las pelotas.
Que casi siempre no fue nadie
que se yo, pero mirame hoy.
Que quiero un día transportarte a mi ser
verás que no es así.
Abrázame que te lo pido,
abrázame, que tengo frío.
Sabe que siempre he sido amigo
de guardar lo del corazón
que casi siempre armo líos
de los que después lloraré.
Abrázame que te lo pido,
abrázame, que tengo frío.
Abrázame que te lo pido,
abrázame, que tengo frío.
