sábado, 8 de enero de 2011

Cuando. El alma. Grita.

Dos noches seguidas de puro llanto. De amor. De abrazos, miradas de fe y comprensión.
Un amanecer repleto de tristezas acumuladas, renovadas, miedos viejos y nuevos.
Un almuerzo que abrazó mi alma.
La garganta presionada de apretar los dientes y tragar fuerte para ganar valor.
Mi voz gastada de tanto fumar.
El pecho saturado de inhalar aire para sentirme fuerte.
La sensibilidad a flor de piel.
Mis hormonas totalmente revolucionadas, anuncian la llegada del retraso de 8 días.

Pero no voy a ser simplista esta vez. No voy a atribuirle todo a mis hormonas. Sigo buscando en lo más profundo, escarbando para no llevarme nada que me tome por sorpresa.
Que salga todo ahora, en esta cuenta regresiva, en este entierro de pesares, en este duelo de personalidades, en esta batalla por ser yo misma, por saberme fuerte y capaz.

Haciendo catarsis las 24 hs. Sintiéndome enloquecer. Descubriendo el poder que tiene la mente, mi mente.
Preguntándome, imaginando, soñando, reafirmando, dudando, respondiéndome, recordando.


Hasta no llegar, no sabré. Me entrego al cambio.
Y que sea lo que sea.
pese a todo esto, alguna parte mía, esta feliz.


No hay comentarios: