Explicamelo.

Pasamos una noche genial, de esas que te hacen creer que puede ser, de esas noches que decís cosas concientemente, y creyendo.
Cantamos, comimos, charlamos mucho, escuchamos música, compartimos musica y disfrutamos de igual manera, tomamos cafe, miramos "la sociedad de los poetas muertos", llore como una condenada y no me juzgó, todo lo contrario. Nos entendemos (casi) completamente.
Y tengo que admitirlo, me gusta. Me gusta él.
Porque soy capaz de aceptar aquellas cosas que me molestan, o que no me gustan porque siento que el resto vale más.
Y es entonces que me pregunto ¿qué es lo que hizo que a las 6 de la mañana el quisiera irse de mi casa... y yo también?

Es más fuerte que yo, y no puedo manejarlo. Intento, pero de verdad no puedo. Y no me siento culpable esta vez... Me hago cargo de no poder parar mi cabeza, pero hay algo que no hay, y no se si hubo, tampoco si habrá. Y me duele que eso haga que el resto, que todo aquello que me gusta y le gusta, sea poco.

Y quiero que sea remontable.

Sus abrazos me abrazan de verdad. Sus besos sacian completamente mi sed de amor.

Pero algo en muy adentro me dice que no hay forma de cambiarlo.

Quisiera poder hacer un trato con la memoria para que los dos borremos ese amanecer, (yo quizá algunas cosas más) y pudiéramos volver a empezar.

Quisiera que no dependiese de una materia.

Quisiera que fusionaramos bien.

Quisiera..

...Wish you were here...